The Prague Post - Una bacteria, unas creencias y una aldea que llora a sus niños en Costa de Marfil

EUR -
AED 4.201855
AFN 82.066555
ALL 98.326526
AMD 446.304273
ANG 2.061798
AOA 1043.317386
ARS 1261.807954
AUD 1.792326
AWG 2.059179
AZN 1.947808
BAM 1.947413
BBD 2.309653
BDT 138.99139
BGN 1.955421
BHD 0.431131
BIF 3401.450587
BMD 1.143988
BND 1.495879
BOB 7.904542
BRL 6.560776
BSD 1.143973
BTN 97.396571
BWP 15.62783
BYN 3.74059
BYR 22422.165913
BZD 2.297804
CAD 1.580831
CDF 3288.965864
CHF 0.935336
CLF 0.0284
CLP 1089.831879
CNY 8.365182
CNH 8.361243
COP 4914.195176
CRC 575.123052
CUC 1.143988
CUP 30.315684
CVE 110.794607
CZK 25.072821
DJF 203.30976
DKK 7.467062
DOP 67.895442
DZD 151.211822
EGP 58.397625
ERN 17.159821
ETB 152.620886
FJD 2.580149
FKP 0.854907
GBP 0.857441
GEL 3.140205
GGP 0.854907
GHS 17.619148
GIP 0.854907
GMD 81.223031
GNF 9901.814942
GTQ 8.812048
GYD 239.973891
HKD 8.875712
HNL 29.65528
HRK 7.528814
HTG 149.62559
HUF 408.539845
IDR 19266.932453
ILS 4.232721
IMP 0.854907
INR 97.445133
IQD 1498.546042
IRR 48176.192396
ISK 144.897963
JEP 0.854907
JMD 181.309135
JOD 0.811429
JPY 161.550594
KES 148.149046
KGS 99.383944
KHR 4594.256503
KMF 491.341013
KPW 1029.658241
KRW 1632.161923
KWD 0.349945
KYD 0.953245
KZT 593.264919
LAK 24710.141797
LBP 102444.130598
LKR 343.062494
LRD 228.168593
LSL 21.370279
LTL 3.377899
LVL 0.691987
LYD 6.217558
MAD 10.543989
MDL 19.5669
MGA 5085.785275
MKD 61.555611
MMK 2401.85185
MNT 4049.635083
MOP 9.139737
MRU 45.321807
MUR 50.919088
MVR 17.618418
MWK 1983.574454
MXN 22.407958
MYR 5.023822
MZN 73.106511
NAD 21.323663
NGN 1838.353785
NIO 42.098689
NOK 11.878171
NPR 155.84381
NZD 1.911507
OMR 0.440463
PAB 1.143804
PEN 4.239641
PGK 4.732617
PHP 64.611307
PKR 321.28918
PLN 4.286547
PYG 9157.560096
QAR 4.17004
RON 4.977039
RSD 116.737234
RUB 93.265219
RWF 1648.101932
SAR 4.291298
SBD 9.525719
SCR 16.611721
SDG 686.965409
SEK 10.915128
SGD 1.499316
SHP 0.898995
SLE 26.054339
SLL 23988.83898
SOS 653.784273
SRD 42.166217
STD 23678.243072
SVC 10.008894
SYP 14874.076575
SZL 21.307234
THB 38.255529
TJS 12.182831
TMT 4.003958
TND 3.387112
TOP 2.679332
TRY 43.763251
TTD 7.769538
TWD 37.212215
TZS 3071.608521
UAH 47.572116
UGX 4186.967512
USD 1.143988
UYU 48.301972
UZS 14767.399564
VES 92.501307
VND 29639.586563
VUV 137.713219
WST 3.188644
XAF 653.109923
XAG 0.034754
XAU 0.000337
XCD 3.091685
XDR 0.812185
XOF 653.14403
XPF 119.331742
YER 280.562755
ZAR 21.272001
ZMK 10297.266771
ZMW 32.57201
ZWL 368.363688
Una bacteria, unas creencias y una aldea que llora a sus niños en Costa de Marfil
Una bacteria, unas creencias y una aldea que llora a sus niños en Costa de Marfil / Foto: Issouf Sanogo - AFP

Una bacteria, unas creencias y una aldea que llora a sus niños en Costa de Marfil

"Por la noche mi nieto se sintió mal, por la mañana había muerto", cuenta a la AFP Amena Djaha. En los dos últimos meses, una veintena de niños de Kpo-Kahankro, en el centro de Costa de Marfil, murieron repentinamente.

Tamaño del texto:

Entre las creencias místicas y la contaminación bacterial, la preocupación persiste en la aldea.

"En una noche mi nieto fue llevado, un niño que tenía un año y algunos meses y que apenas caminaba", dice Amena Djaha.

Sentada bajo un árbol de mango en este poblado cercano a la ciudad de Bouaké, la mujer recuerda aquella funesta noche de diciembre.

En Kpo-Kahankro, el 2 de diciembre, seis niños empezaron repentinamente a vomitar, se pusieron rígidos y con los ojos vueltos antes de morir brutalmente en cuestión de horas.

A finales de enero, cuando se disipó la conmoción del pueblo, unas 15 personas -en su mayoría niños y algunos ancianos- murieron súbitamente en las mismas circunstancias. Decenas de pobladores fueron hospitalizados en Bouaké.

"La gente vino a tocar a mi puerta y gritaba 'la historia empieza de nuevo'", recuerda Dorothée Kouamé Ahou.

Una lágrima baja por su mejilla mientras relata cómo ella también perdió a su nieta de tres años de la noche a la mañana.

"Ni siquiera he podido ver de nuevo a mi princesita desde que murió. La extraño", lamenta esta abuela de 46 años.

"Es algo místico", afirma el jefe de la aldea, Nanan Koffi Patrice.

- "Charlatanería" -

En Kpo-Kahankro no hay duda de que un fetiche, un objeto con poderes misteriosos en casa de François Kouame Kouadio, un líder de la aldea, es la causa de las desgracias que se han abatido sobre la comunidad.

La tesis fue retomada por el tribunal de Bouaké, que el jueves condenó a Kouadio y al "fetichista" acusado de instalar el objeto, a cinco años de prisión por "actos de charlatanería y alteración del orden público".

Frente a la crisis, miembros del gobierno se desplazaron varias veces a Kpo-Kahankro.

El fetiche fue sacado de la tierra a principios de febrero y se realizaron autopsias a algunos de los cadáveres, que no han sido devueltos a sus familias.

Según las autoridades se trata de una contaminación con clostridium, una bacteria que se encontró en el fetiche y que puede causar síntomas graves en niños y ancianos. El saldo oficial es de 16 muertos, aunque los pobladores cuentan 21, incluidos 18 niños.

Esa conclusión convence a los aldeanos, aunque no disipa todas las zonas grises.

"Me alegra que el fetiche fue desenterrado, es lo que mató a nuestros niños", dice Amena Djaha.

"Pero mi nieto nunca entró en contacto con ese objeto. Apenas caminaba y nunca salía del patio", agrega la mujer que vive a cientos de metros del punto de contaminación.

- "Tenemos miedo" -

Los pobladores tienen claro que no hubo ninguna ceremonia alrededor del fetiche para niños ni para los que se enfermaron después.

Entonces, ¿cómo se propagó la infección con clostridium a tantos niños del pueblo".

"Basta con que un niño haya estado en contacto con la bacteria y luego se lleve las manos a la boca para enfermar. Puede contaminar juguetes, objetos y, por tanto, a otros niños", explicó Joseph Bénié Bi Vroh, director del Instituto Nacional de Higiene Pública (INHP), quien supervisó los análisis.

Mientras tanto, frente a la misteriosa epidemia, la aldea cuya escuela había cerrado y que se quedó sin habitantes, se va repoblando poco a poco.

La semana pasada, el fetiche fue desenterrado y trasladado fuera de Kpo-Kahankro.

El servicio de agua, cortado durante varios días para realizar análisis adicionales, fue restablecido el jueves.

Desde entonces se detuvieron las muertes, aunque sin disipar del todo la inquietud de los pobladores.

"¡Claro que tenemos miedo! Hubo casi un mes de 'dejadez' entre los dos sucesos en los que se dieron muertes", dice Paul Kouassi, presidente de una asociación de jóvenes de la aldea.

El jefe del poblado suspira: "Rezo para que no vuelva a ocurrir. Nuestros hijos aún no han sido enterrados".

N.Kratochvil--TPP